Cristo amó a la iglesia y se entregó a sí mismo por ella, para santificarla, habiéndola purificado en el lavamiento del agua por la palabra. Andad en amor, como también Cristo nos amó y ...
LIMPIAME, SEÑOR
Lávame de toda mi maldad. Los purificaré de todas las iniquidades que cometieron contra mí; les perdonaré todos los pecados con que se rebelaron contra mí. Esparciré sobre vosotros agua limpia, y ...